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A medida que los distintos países iban decretando el aislamiento obligatorio o cuarentena, las compañías que podían pedirle a sus empleados que hagan Home-Office, lo hicieron. 

Listo, fin del problema.

¿O no...?

Aquellos que ya habían hecho home-office antes, ahora se encuentran con que tenían resuelto el cuidado de sus hijos y las tareas domésticas, lo que no ocurre en este contexto.

Repartirse entre las tareas del hogar, la crianza de de los hijos y el cuidado de adultos mayores deja pocas ventanas de tiempo de concentración 100% en el trabajo. 

Por otro lado, las personas que no habían hecho home-office nunca, se encuentran con todas estas cuestiones y algunas más. 

He aquí 4 de los principales problemas que están identificando los empleados de acuerdo a los datos recabados por Slik que impactan de manera directa la productividad:

La persona se encuentra con que los documentos, sistemas, redes y accesos no son 100% iguales que estando en la oficina. En esos casos, es momento de aprender a usar herramientas de colaboración virtual como Google Drive, Trello, redes VPN, etc. 

1. Falta de comunicación con colegas

Mucho se habló durante estas semanas sobre el uso de Zoom, Meets, Teams y otros canales para llevar a cabo reuniones virtuales, pero simplemente no es lo mismo que los encuentros presenciales. La rapidez de respuesta y agilidad de tener a alguien sentado al lado no se puede comparar.

Además, existe lo que se conoce como "Zoom Fatigue", que se refiere al impacto de tener que estar hablando con muchas caras al mismo tiempo y la imperceptible incomodidad que genera tener a tantas personas mirándolo fijo a uno.

2. Fallas en la conexión a internet

Parece mentira que en pleno 2020 siga habiendo problemas de conectividad, pero este es un inconveniente al que hacen referencia muchos empleados. Quizás en algunos países más que en otros, pero lo cierto es que el sistema de telecomunicaciones está colapsado en distintas zonas del mundo.

3. Dificultad para concentrarse por tareas familiares

Hay personas que cuentan con un espacio en su casa para concentrarse, otras que viven solas, pero la mayoría de las empleados vive con alguien y no cuenta con una “oficina personal” para trabajar, lo hacen en algún sector común de su hogar… entre niños, juguetes, televisores encendidos, etc.

¿Qué hacemos entonces?

Cada organización tiene una realidad distinta, así que lo primero que hay que hacer es indagar cuál es el impacto percibido de la baja en la productividad. 

Al igual que hicimos con la encuesta para relevar la situación de COVID-19, les dejamos algunos ejemplos de preguntas para entender cómo mejorar la productividad al realizar Home Office:

Como siempre, los invitamos a usar estas preguntas en cualquier plataforma que crean conveniente. En caso que quieran probar Slik, no duden en contactarse con nosotros para poder hacer esta encuesta de manera 100% gratuita a sus equipos!